Una novela sobre el paso del tiempo, los condicionantes del carácter y la colisión de la propia realidad con la de aquellos que nos acompañan en el camino.
Qué: Libro (edita Mondadori)
Gonzalo Torné debutó en la novela hace seis años con Lo inhóspito y tres años después confirmó los buenos augurios con la llegada de Hilos de sangre, una obra que investigaba sobre la complejidad de la condición humana y que, lejos de ser un sesudo ensayo sobre cuestiones metafísicas, funcionaba perfectamente a la hora de atrapar al lector con una historia vibrante. Ahora regresa con Divorcio en el aire, la historia de Joan-Marc y Helen. La pareja acude a un balneario para tratar de salvar su matrimonio: una crisis que probablemente tiene su raíz en la educación del propio Joan-Marc, su inicio sexual, las desastrosas relaciones con su familia, sus problemas financieros y el reencuentro, ya en las puertas de la madurez, con antiguos compañeros de clase, a los que la vida ha situado en posiciones insospechadas. Todo se cuenta con pulso sostenido, tensión bien administrada que aborda una cuestión fundamental: la dificultad del paso del tiempo y su irreversibilidad.
