La banda canaria, liderada por Sergio Oramas, lanza su segundo disco y apuesta descaradamente por la verbena kitsch: teclados Casio y letras de canción del verano.
Qué: Disco (independiente)
Desde las Canarias con Casios, pertrechados de guasa y alegría por si se acaba el mundo en cualquier momento. Supertrópica juega con varias referencias en su aproximación a la música: la fiesta es una de ellas, el humor tiene su papel y la atmósfera que crean los sonidos de los sintetizadores retro acaba de completar la decoración del pastel. Muy poco se puede decir de Odisea carnavalera después de oírla: colegas calamares, orcas, osos polares, cocos y lobas. La voz chiclosa de Sergio Oramas va surcando la canción en una suerte de alegoría kitsch que invita a bailar sin reflexionar, festejar como si no hubiera un mañana. La farra musical que aquí se retrata sale a la luz gracias al crowdfunding y tiene un destino claro: las verbenas veraniegas, que en su archipiélago son más, y que el grupo se monta por Internet, dado que viven desperdigados. Pepe Benavente, rey de ese reino verbenero, colabora en el sencillo que abre el disco, Pepe vente a Alemania. Lo dicho: si vuelve el landismo al cine español y se viste con guayabera, ya tenemos la banda sonora ideal.
