Liberada de cualquier compromiso grupal, la bogotana Pedrina da un golpe de mesa al tiempo que abre la puerta a una etapa en solitario que inicia sobre terrenos conocidos pero sin trazarse límites.
Qué: Disco (Independiente)
A finales de la primera década del Siglo XXI, la voz de Edna Arcila emergió en el underground musical bogotano como un embrujo poderoso y magnético que empujaba hacia adelante el sonido de Hotel Mama, una banda que, como varias de su generación, se dejó seducir por las músicas tradicionales de las costas colombianas y las puso a dialogar, a veces con desenfreno y a veces con desenfado, con la electricidad afilada del jazz.
Luego de editar un álbum de debut y despedida, en 2008, el panorama sonoro se expandió para Edna; unos años más tarde su voz y su nombre reaparecieron transfigurados: el ímpetu de Hotel Mama daba paso al encanto del pop de Pedrina y Rio, un dueto integrado por Edna y Javier Cerón, quien fuera su profesor de canto. La crítica y el público más joven se rindieron a la dulzura de Canciones sin ropa, el álbum que los llevó a presentarse en el continente americano y España, editado en 2015, gracias a canciones como Enamorada.
La experiencia grupal acumulada a lo largo de tres años fue suficiente para que Edna decidiera emprender su camino personal y en solitario; Prisma, su primer álbum firmado como Pedrina, es el testimonio de ello, de sus aprendizajes y sus anhelos, entremezclados con el riesgo estético y la confianza de saberse sola pero capaz.
Acompañada en la producción por el gran Richard Blair (Sidestepper, Bomba Estéreo, ChocquibTown), Julián Salazar (Mitú) y Oscar Alford (Pedrina y Rio), presenta una colección de nueves canciones que resuman pop de gran factura. Su voz y sus letras, como en sus proyectos anteriores, impulsan la trama sonora de un disco minimalista que retrata el amor cotidiano y se sostiene con filigrana electrónica al tiempo que transita, con paso lento, los caminos del dancehall (junto a Martina La Peligrosa) en Hoy, del son cubano (al lado del argentino Juan Ingaramo) en Inevitable, y del vals ranchero y el bolero (en compañía de Rio) en Adiós y Billete falso.
Menos orgánico y más experimental que Canciones sin ropa, el debut en solitario de Pedrina coquetea con dub, bossa nova, soul, folk anglosajón y balada romántica, impregnándolo del espíritu naif propio del pop hispanoamericano de esta época en la que alentar a los corazones también es una consigna.
Pedrina presentará Prisma en directo en España entre el 2 y el 11 de mayo con conciertos en Sevilla, Murcia, Donosti y Madrid, para luego continuar por México –del 16 al 28 de mayo– con shows en Querétaro, CDMX, Toluca y Puebla.
