Como ya avisaba el compositor y arreglista madrileño José Sánchez-Sanz, en algún momento tenía que dar su salto a la canción. Hipster! es la prueba de que no iba de farol pero también de mucho más.
Qué: Disco (independiente)
En tiempos donde la capacidad de la transmisión oral se pierde entre millones de golpes de clic y tendencias con fecha de caducidad programada, es todo un alivio toparse con pequeños milagros como lo es este EP del compositor, músico y arreglista José Sánchez-Sanz. Y es que, más allá de un envoltorio narrativo de ironía a flor de piel, cada uno de los cinco cortes aquí reunidos, trabajados y profusamente arreglados, orbitan como planetas independientes de una misma galaxia sónica.
Es entrar por la puerta grande de Ignorante, y caer cautivo bajo la expresividad de un mecanismo de reloj suizo perfectamente calibrado. Entre la voz de planicie horizontal de José y la exuberancia del entramado musical que la arropa, se palpa el mimo con el que se ha trufado todo el contenido de un sinfín pequeños detalles. Tantos como escuchas son necesarias para poder captar la profundidad de campo abierta en todo momento.
No en vano, estamos ante un trabajo de cromatismo al cubo, donde cabe el funk achampañado, en tonos Dinarama, de Canción de amor romántico, el ritmo verbenero de la titular, pasando por cortes tan en cinemascope como Ignorante, Perdido en el edredón y Nana de la corrupta. Son canciones donde la palabra de José cobra formas y colores diferentes, según el tono escogido para cada una de las historias que aquilatan las cinco esquinas de este pequeño gran tesoro, rubricado con la brillante producción de Abel Hernández, El Hijo.
