Si en estos últimos años hay un grupo portugués que ha despertado un aluvión de críticas entusiastas, ese ha sido el combo lisboeta Beautify Junkyards. No en vano, sus dos últimos LPs son muestras inequívocas de un imaginario onírico donde psicodelia, electrónica retro y krautpop nos dan la receta de un pop hipnagógico astral. La excusa ideal para hablar con sus miembros antes de que vuelvan a arrastrarnos a mundos pastorales de ensueño con su próximo álbum.
En primer lugar, para ponernos en contexto, ¿cómo y bajo qué concepto surge Beautify Junkyards?
Algunos de nosotros teníamos una banda anterior llamada Hipnótica y en un momento dado tuvimos la necesidad de experimentar cosas nuevas, así que comenzamos a hacer algunas sesiones en vivo, tocando versiones de canciones que nos gustan, en su mayoría del acid folk británico. La experiencia fue tan intensa que decidimos grabar un disco y cuando llegamos al punto de lanzarlo sentimos que teníamos que hacerlo como una nueva banda, porque era una ruptura total con nuestro pasado, ahí apareció Beautify Junkyards. No fue algo muy planeado, simplemente sucedió y nos dejamos llevar por la corriente de los acontecimientos.
Pertenecéis a Ghost Box, el sello pop hipnagógico más relevante del mundo. Pero, ¿cómo os ha influido uniros a un sello con propuestas tan retro sci-fi como Belbury Poly o The Advisory Circle?
Bueno, dentro de nuestro ADN, forman parte BBC Radiophonic Workshop, Mort Garson, Raymond Scott o Wendy Carlos, así que cuando descubrimos un sello como Ghost Box, que tenía tanta afinidad con ese tipo de sonidos, añadiéndole library music y bandas sonoras exóticas de campo, empezamos a seguir de cerca sus brillantes proyectos. También libros como Electric Eden, de Rob Young y Ghost Of My Life, de Mark Fisher tienen referencias específicas a Ghost Box y su conexión con cosas que no son tan palpables, más enigmáticas y místicas. En ese momento, es cuando percibimos que nuestra conexión era más fuerte que amplia y decidimos enviarles nuestro material (en ese momento, material original con más influencias electrónicas), aun sabiendo que no suelen recibir demos. Supongo que también sintieron esa conexión que no se puede expresar con palabras.
«El uso del lenguaje es una de las características de lo que entendemos por “marca personal”. El portugués es un idioma muy rico y explorar su potencial en melodías y métricas trae nuevas dimensiones a nuestra música»
El último LP, Cosmorama, es un trabajo que consolida vuestra imaginación musical, donde el krautpop, la psicodelia y la electrónica analógica definen una forma de abordar el futuro reimaginando el pasado del pop. ¿Cómo os veis dentro de esta forma de abordar la historia ya conocida del pop?
Nuestra música solo es posible de crear en el presente. El acceso a la música del pasado y las herramientas de creación ahora es omnipresente, por lo que este tipo de entorno crea un crisol perfecto donde podemos sumergirnos y buscar inspiración y elementos en los que sentimos esa extraña afinidad que mencionaba antes. Nos sentimos como si hubiéramos recibido un testigo en una carrera de relevos de larga distancia, en la que debemos elegir nuestro rumbo y seguir adelante. Buscar inspiración en la kosmische alemana, la tropicalia brasileña, la electrónica temprana británica o el folk portugués, solo tiene sentido para nosotros si podemos imprimirle nuestra marca personal.
El hecho de cantar en portugués en muchas de vuestras canciones aporta una redefinición musical muy poderosa a un universo musical culturalmente muy anglófilo que remite a grupos contemporáneos como Vanishing Twin, pero también a clásicos como Broadcast o Stereolab. ¿Dónde está el gen diferenciador que hace que vuestra música suene con tanta personalidad?
El uso del lenguaje es una de las características de lo que entendemos por «marca personal». El portugués es un idioma muy rico y explorar su potencial en melodías y métricas trae nuevas dimensiones a nuestra música. Al crear una canción, sentimos cuál es la mejor manera de expresarla en palabras. Creo que el «gen diferenciador» viene de multitud de factores, además de nuestras inspiraciones, el hecho de que tengamos en la banda músicos con mucho carácter, la elección de los instrumentos, el universo de las letras, etc.
Precisamente, acabáis de lanzar el single Verde pino, que es una versión de una canción de Nuno Rodrígues. ¿Cómo surge la idea de hacerla y cómo encontráis el vínculo entre el universo de Nuno y vuestra esencia?
Siempre estamos explorando nuestras raíces musicales portuguesas. En el pasado hemos hecho versiones de Zeca Afonso y Fausto. Nuno Rodrigues está asociado con una de las bandas folclóricas portuguesas más importantes, A Banda do Casaco, y nos encanta su trabajo. En el caso de esta canción, fue creada para el concurso de Eurovisión y fue cantada para Daphne. Llegamos a ella por recomendación de un amigo que trabaja en la emisora nacional portuguesa RTP, y como estábamos a punto de producir una película sobre una sesión en vivo, pensamos que era una canción hermosa para incluir.
Creo que, como la mayoría de las propuestas que pertenecen a Ghost Box, las referencias visuales que invitan a la pulsión onírica son tan importantes como las referencias musicales. De hecho, vuestra música hace pensar en películas de Chris Marker, Tarkovsky e incluso Parajanov. ¿Qué ecos visuales impulsan vuestra inspiración?
Tienes razón, el cine es muy importante para el «mundo» de Bautify Junkyards. Somos grandes cinéfilos e incluso uno de nuestros miembros (João Moreira) es director de cine. Hay películas muy emblemáticas para nosotros en cuanto a banda sonora: Wicker Man, Valerie And Her Week Of Wonders, ClockWork Orange, Belladonna Of Sadness… Pero también está la inspiración que proviene de las imágenes y la narrativa. Los dominios oníricos y surrealistas son los que más nos atraen, y los nombres que mencionas son buenos ejemplos de ello. Las imágenes son elementos fuertes en BJ, ya sea en la fascinante obra artística de Julian House o en las imágenes que creamos para proyectar durante nuestros conciertos, que nos ayudan a producir una experiencia multisensorial.
Dentro de una música en cinemascope tan visual como la vuestra, ¿qué grado de trascendencia tiene hacer un proyecto como «Cosmorama Movin Images»?
Es un proyecto que tuvimos en mente desde hace tiempo y durante la pandemia se crearon las condiciones para producirlo. Fuimos influenciados por los trabajos de vídeo de Stan Van der Beek y usamos una serie de proyectores de vídeo en una habitación durante una presentación en vivo, con interludios surrealistas con palabras habladas por Justin Hopper (escritor y también artista de grabación de Ghost Box). Como decía antes, esto nos ayuda a llevar a la gente una noción más completa de lo que estamos hechos.
Aparte de esta novedad, también vais a publicar la banda sonora de la película A viagem do rei. ¿Cómo ha sido crear música a través de patrones visuales ya definidos del universo musical de Rui Reiniho?
La película fue dirigida por João Moreira (uno de los integrantes de la banda), por lo que la experiencia de producir la banda sonora fue más intensa y cercana al proceso de creación de la película desde el principio. La personalidad y la vida de Reininho tiene muchas caras para explorar, así que tratamos de traducir esos aspectos a la música, a veces de electrónica más luminosa y en otras partes más nocturna y enigmática, a veces más jazzística y en otras partes más onírica.
Aparte de Beautify Junkyards, lideras un proyecto como Hidden Horse, que por momentos recuerda a proyectos eminentemente electrónicos como Moon Wiring Club. ¿Por qué surgió esta propuesta aparte del grupo principal y qué referencias tuvisteis para encontrar vuestro sonido?
Tony (batería de BJ) y yo teníamos esa idea en mente desde hace algún tiempo, y ahora que decidimos vivir exclusivamente para la música, finalmente tenemos tiempo para producirla. Queríamos explorar diferentes ambientes, más instrumentales y electrónicos inducidos, rítmicamente más ricos y sónicamente más aventureros, en muchos aspectos muy diferentes de Beautify Junkyards. Bandas como Throbbing Gristle, Cabaret Voltaire y Coil, están entre las que más nos inspiran, pero también artistas contemporáneos como Demdike Stare o Leyland Kirby. Lanzamos nuestro primer álbum Opala en febrero a través de un sello local llamado Holuzam y ahora estamos en proceso de grabar un segundo álbum que deseamos lanzar a principios de 2023.
«Nos sentimos como si hubiéramos recibido un testigo en una carrera de relevos de larga distancia, en la que debemos elegir nuestro rumbo y seguir adelante. Buscar inspiración en la kosmische alemana, la tropicalia brasileña, la electrónica temprana británica o el folk portugués, solo tiene sentido para nosotros si podemos imprimirle nuestra marca personal»
En los últimos años habéis recibido elogios de figuras tan importantes como Simon Reynolds y de revistas como The Quietus o Wire. De hecho, donde tenéis la red más masiva de seguidores es en Inglaterra, ¿qué significa esto para una formación portuguesa como la vuestra?
Es algo que nos enorgullece, ser reconocidos entre publicaciones y personas que respetamos mucho y con las que crecimos leyendo, y de las que fuimos influenciados. Ya hicimos una gira por el Reino Unido y el año que viene queremos volver allí para hacer algunos conciertos. Sentimos que tenemos una fuerte identificación con la gente de allí. Siempre es una experiencia emocionante. El año que viene también queremos tocar en otros países como España e Italia, más cerca de Portugal y donde sentimos que también hay potencial para llegar a un público interesado.
¿Qué más nos espera de Beautify Junkyards en el futuro?
Estamos empezando a pensar en un nuevo álbum, discutiendo ideas y compartiendo playlists entre nosotros. Esperamos hacer algunas sesiones de improvisación en el campo. Planeamos lanzar un nuevo disco a finales de 2023 y, mientras tanto, estaremos de gira y crearemos nuevas canciones que sumaremos a nuestro directo.